Antes de hablar de la importancia en el posicionamiento del paciente para radiografías panorámicas, nos parece interesante tener en cuenta, como contexto, que el descubrimiento de los Rayos X, así­ como otros avances de la ciencia, se produjo por casualidad cuando el físico alemán, Wilhem Conrad Roedtgen, la noche del 8 de noviembre de 1895 estudiaba las propiedades de los rayos catódicos. En aquel momento se da cuenta de la existencia de una nueva fuente de energía hasta entonces desconocida y por ello la denominó radiación X. Desde entonces, el campo de la radiología en el campo médico y dental no ha hecho más que avanzar y mejorar, haciendo que el uso de radiación ionizante, con dosis cada vez más bajas, generen más beneficios que riesgos, en pos de la salud de los pacientes.

En odontología es imprescindible el uso de radiografías para poder obtener un buen diagnóstico y para la comprobación de que el tratamiento va por buen camino y/o se ha realizado exitosamente. Muchos pacientes llegan a la consulta atemorizados por el hecho de que han escuchado por diferentes vías la información del efecto dañino de estos rayos para la salud. Y ciertamente, la exposición continua con dosis muy altas a las radiografías, sin la protección adecuada, se asocia al riesgo de desarrollar algún tipo de cáncer.

Por ello es muy importante el correcto posicionamiento del paciente a la hora de hacer una radiografía. Este paso es fundamental para obtener la mejor imagen, con la mayor cantidad de información y además nos permitirá disminuir la dosis al paciente, ya que evitaremos repeticiones por error en posicionamiento o falta de explicación al paciente de cómo colocarse y qué hacer durante la radiografía.

¿Cómo identificar una imagen panorámica correcta?

Hay 3 puntos por los que se puede saber si la radiografía está bien tomada:

1. Incisivos situados en el centro de la imagen.
2. Articulaciones ATM situadas a la misma altura y posición, tanto izquierda como derecha.
3. El plano oclusal muestra una leve sonrisa.

posicionamiento del paciente para radiografías panorámicas

 

Para llegar a este diagnóstico hay que realizar una buena captura, guiando al paciente en todo momento. Los pasos son:

1. Advertir al paciente que debe retirar cualquier material metálico, que esté cerca de la zona de exposición (pendientes, collares, piercings…)
2. Colocar el delantal plomado.
3. Ajustar el aparato de rayos a la altura del paciente y colocarle.
4. Indicarle cómo debe colocarse, independientemente del aparato de rayos x, cuanto más bajas están las manos, más abajo estarán los hombros, y menos riesgo que roce el cabezal giratorio, los pies ligeramente más adelante que la cabeza y la cabeza tendiendo a mirar al suelo ligeramente, para mantener las cervicales abiertas y hagan la menor sombra posible a los incisivos.
5. Colocar la funda al mordedor y que muerda, en la ranura de referencia, no delante ni detrás.
6. No todas los aparatos de ortopantomografía cuentan con láser de posicionamiento, pero sí que todos cuentan con algún tipo de guía, para poder ubicar el plano de Frankfurt.
7. Por último, recomendar al paciente que suba la lengua al paladar y cierre los ojos, para evitar movimiento reflejo respecto al movimiento del aparato de rayos.

¿Cómo identificar que se ha realizado mal una radiografía?

Si el posicionamiento, o los ajustes del ortopantomógrafo no han sido los correctos, habrá distorsiones en las radiografías. A continuación enumeramos los errores más comunes y consejos para corregirlos.

Radiografía con error en la mordida.

Si el paciente muerde delante de la ranura que traen los posicionadores de radiografías panorámicas, la zona central de la imagen se verá muy difusa y comprimida.

Si el paciente muerde por detrás de la ranura, la zona central se verá difusa y ensanchada.

 

Plano de Frankfurt incorrecto

Si el paciente tiene la cabeza muy inclinada hacia delante, el plano oclusal formará un pico.

Si el paciente, por el contrario tiene la cabeza muy recta o hacia atrás el plano oclusal se verá plano.

Paciente que se ha movido durante la radiografía

Si el paciente se mueve durante la exposición, obtendremos una radiografía sin definición y borrosa.

 

Paciente con objetos metálicos

Si no se ha advertido al paciente de la retirada de los objetos metálicos antes de una radiografía, obtendremos una imagen con reflejos no deseados.

 

Todas estas indicaciones y recomendaciones, sin duda, harán que las radiografías siempre sean las óptimas, independientemente de la calidad del aparato de rayos x, y que el paciente reciba la dosis indispensable para obtener una imagen con definición y calidad.

En SP INTEGRA contamos con técnicos especializados en radiologías dental y es parte de nuestro trabajo ofrecer toda la formación e información necesaria para la correcta utilización de las máquinas radiológicas sobre las que intervenimos. Si tiene dudas o preguntas al respecto, estaremos encantados de ayudarles. Contáctenos 922 97 17 80 |info@spintegra.es

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